LA NOTICIA
En los próximos meses, los mercados globales de renta fija estarán muy centrados en las prioridades de la administración Trump. A medida que se desarrolle la agenda y el mercado espere mayor claridad sobre las políticas arancelarias estadounidenses y las respuestas de los gobiernos globales, los inversores en bonos deberían priorizar la selección activa tanto de sectores como de valores individuales.
DAME CONTEXTO
Es probable que las políticas fiscales incrementen aún más la dispersión fundamental (el diferencial de rentabilidades entre los activos de renta fija), así como la volatilidad de los tipos de interés y los diferenciales (la diferencia de rendimiento entre los bonos).
¿ENTONCES?
Para 2025, se sugieren cuatro enfoques principales para los inversores en renta fija:
- Selección activa de valores: Es crucial ajustar proactivamente la duración de las carteras y posicionar los activos para superar los índices pasivos. Esto requiere identificar títulos infravalorados y aprovechar las ineficiencias del mercado para obtener mejores rendimientos.
- Enfoque en calidad crediticia y rendimientos ajustados por riesgo: Con diferenciales ajustados en bonos de grado de inversión y altos costos en bonos de alto rendimiento, es vital elegir bonos específicos basados en su solidez crediticia y potencial de retorno ajustado al riesgo. Esta estrategia ayuda a mitigar riesgos y optimizar rendimientos.
- Optimización de la combinación de activos: Los inversores deben considerar una mezcla diversificada de Bonos del Tesoro de EEUU, bonos corporativos, crédito securitizado y deuda de mercados emergentes. Aprovechar las oportunidades a lo largo de la curva de rendimiento, particularmente durante los cambios entre duraciones cortas y largas, puede mejorar el perfil de rendimiento de la cartera.
- Evaluación de condiciones macroeconómicas: Monitorizar de cerca factores macroeconómicos es fundamental, incluyendo las políticas arancelarias, el entorno fiscal de EEUU, la política monetaria y sus repercusiones en los mercados de crédito. Estas variables influyen directamente en la valoración y el comportamiento de los instrumentos de renta fija.
¿ALGO MÁS?
La renta fija continúa desempeñando un papel esencial en la diversificación de carteras, ofreciendo una correlación negativa con activos más riesgosos, lo que es valioso en tiempos de incertidumbre. Aunque el reciente anuncio de aranceles ha generado volatilidad, el mercado de tasas de interés ha comenzado una recuperación. Actualmente, los altos rendimientos iniciales en bonos son indicativos confiables de potenciales buenos rendimientos futuros.
¿OTRO DATO RELEVANTE?
En el sector del crédito corporativo, a pesar de la incertidumbre que generan las nuevas tarifas, los balances de las empresas siguen siendo sólidos. Esto es importante para el sector de grado de inversión, aunque subsectores como el automotriz puedan enfrentar desafíos debido a las alteraciones en las cadenas de suministro globales. En este contexto, priorizar emisores de alta calidad con balances sólidos por sobre un enfoque general en índices pasivos es clave.
¿QUÉ MÁS PASÓ?
Vemos que abril estuvo marcado por un incremento de volatilidad en el mercado de bonos, el cual a pesar de haber disminuido considerablemente, sigue entre los niveles más alto del año.