EN RESUMEN
- Evitar la propagación del COVID-19 es clave.
- Nivel de empleo se recupera.
- Perspectivas económicas lucen alentadoras.
ENTRE EL COVID-19 Y EL SHOCK ECONÓMICO
LA NOTICIA
En marzo de 2020, cuando la pandemia del Covid-19 empezó a afectar la economía de EEUU, el objetivo era el de aplanar dos curvas, la del esparcimiento viral y la del shock económico.
DAME CONTEXTO
Más de un año después y luego de dos picos importantes de la propagación del virus, y con el avance del lanzamiento de la vacuna, algunas regiones finalmente están cerca de aplanar ambas curvas. Muchos otros han visto tres o incluso cuatro picos; su situación sigue siendo difícil, y en algunos países es tan mala como siempre.
ESPERA, RETROCEDE
Si bien algunos países de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) lograron limitar la propagación exponencial del virus, no pudieron aplastarlo. Dependiendo de la efectividad de su respuesta, los países y regiones terminaron con resultados económicos claramente diferentes.
¿ENTONCES?
A principios de 2020 hubo un debate sobre la compensación entre el virus y la economía y los resultados ahora son claros: ningún país mantuvo su economía en buen movimiento sin tomar también el control de la propagación del virus.
¿QUÉ MÁS PASÓ?
Las vacunas contra el COVID-19 se desarrollaron en un tiempo récord y están funcionando de forma efectiva. Además, los programas de vacunación masiva se están acelerando en muchos países y el sentimiento sobre la adopción de vacunas está mejorando.
¿OTRO DATO RELEVANTE?
Han habido retrocesos y abundan los riesgos, y la formación de nuevas mutaciones del virus es motivo de especial preocupación. En el frente económico, el apoyo del gobierno a través de políticas fiscales y monetarias también ha funcionado, con el nivel de empleo recuperándose en todos los países, aunque a ritmos diferentes. Como resultado, la incertidumbre está disminuyendo.
PARA NO PERDER DE VISTA
Las perspectivas de progreso económico son alentadoras para los países que lideran la salida del COVID-19, y se esperan tasas de crecimiento tanto para 2021 como para 2022. Es una realidad que el virus aún dicta la economía.
POR ÚLTIMO
Con la salida de la pandemia, la economía global tendrá que lidiar con dos preocupaciones planteadas como parte del debate sobre “buscar el crecimiento“. Una preocupación es la posibilidad de una mayor inflación; la otra es que la deuda recientemente acumulada se volverá insostenible y limitará el crecimiento.
EN CONCRETO
En EEUU, por ejemplo, la deuda en 2020 alcanzó el 133% del PIB, superando el récord anterior de 123% en 1946, justo después de la Segunda Guerra Mundial. Pero en los años de la posguerra, y en muchos otros ejemplos a lo largo del tiempo, la carga de la deuda se redujo impulsando el crecimiento nominal, no reduciendo la deuda.
CONCLUSIÓN: NUEVAS OPORTUNIDADES
Ciertamente, el golpe de esta pandemia nos acompañará durante mucho tiempo. La gran pregunta es si ahora podemos convertir esta crisis en un momento de pivote, donde aprovechemos las innovaciones, los nuevos conocimientos y la determinación fortalecida de mejorar el mundo tras la crisis.